Manel: «Ha sido un año difícil, estamos contentos por haberlo sacado adelante»

Manel Silvestre, entrenador de Waterpolo Navarra, analiza y valora la temporada recién concluida, una campaña a su juicio «muy complicada» pero en la que el equipo ha vuelto a conseguir el objetivo: la permanencia en la máxima categoría del waterpolo nacional. El conjunto navarro cumplirá el año que viene diez temporadas en la División de Honor, algo que tiene «un mérito enorme» según el técnico.

¿Cómo valora la temporada que acaba de terminar?

Ha sido un año súper difícil, sobre todo en cuanto a lesiones y enfermedades que nos han dejado en muchos partidos en cuadro, con lo puesto. Además, había jugadores que se iban a jugar con el equipo ‘B’ porque en algunos momentos considerábamos prioritario ayudar al ‘B’ a salvarse. Así, se daban situaciones inverosímiles como ir a jugar contra Terrassa o Mediterrani con sólo 5 ó 6 jugadores del primer equipo. Luego, cuando nos estábamos jugando partidos importantes contra Molins, Catalunya o Rubí había jugadores que jugaban lesionados. Hemos tenido lesiones de isquiotibiales, hombros; enfermedades como paperas, otitis; Dusan (Aleksic) tuvo una conmoción cerebral con su selección… Ha sido la temporada más complicada.

A pesar de las dificultades, el equipo ha vuelto a conseguir el objetivo de la salvación.

Estamos contentos por haber podido sacarlo adelante. Nos queda la espina de los partidos contra Molins: el primero nos pilló desprevenidos, creo que somos mejores y deberíamos haber ganado en casa; el partido de vuelta lo jugamos con Dusan (Aleksic) tocado después de la conmoción cerebral que sufrió con su selección y eso nos condicionó, porque no teníamos portero reserva y él no estaba fino, lógicamente. Nuestra trayectoria ha estado marcada por el calendario: en las primeras jornadas jugamos una especie de ‘liguilla’ entre los equipos de abajo, ganamos nosotros y por eso nos hemos salvado. Porque en la segunda parte de la temporada todos hemos tenido que jugar contra los Terrassa, Atlètic Barceloneta, Sabadell, partidos muy complicados. Teníamos ganas de hacer un buen partido ante Mataró en la última jornada, con todo el equipo ya disponible, por fin, y la verdad es que pese a la derrota lo hicimos bien. Fue uno de los mejores partidos que hemos jugado en Amaya.

Varios jugadores del ‘B’ y de la cantera han debutado en División de Honor. Buena noticia.

Este año hemos jugado con más de 30 jugadores en División de Honor. Es una barbaridad, está muy bien. Además, muchos chavales han estado en el meollo, jugando minutos importantes con marcadores apretados. Eso es un impulso para ellos, les hace tener fe, creérselo, coger personalidad y luego volver al equipo ‘B’ con otro espíritu. Nos gustaría ser un equipo más potente, pero no lo somos. Sabemos que podemos perder muchos partidos, pero lo importante es que estamos en la máxima categoría y estamos trabajando con la cantera. Si algún día se va todo a hacer puñetas podemos estar tranquilos: hay equipos abajo, tenemos a 80 tíos atrás empujando.

El ‘B’ también se ha salvado y Waterpolo Navarra mantiene dos equipos en categoría nacional.

Es importante. No es lo mismo la Liga Euskal Herria, con juveniles y cadetes que lo están haciendo muy bien, que una categoría nacional. En Segunda División te toca jugar contra gente veterana, gente de waterpolo, contra equipos catalanes y de otros lugares, con lo que te acostumbras a viajar y a esa dinámica más profesional. El ‘B’ es un equipo súper joven, que haya logrado la permanencia está muy bien.

La próxima temporada será la décima en División de Honor.

Estar diez temporadas en División de Honor es algo muy complicado que tiene un mérito enorme. Se están haciendo las cosas bien y hay que tenerlo en cuenta.

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